Tema 04: PROMESAS DE VIDA
Capítulo 01: ESCOGIDOS
Serie: UNCIÓN
Como todas las cosas que pertenecen a la vida y a la piedad nos han sido dadas por su divino poder, mediante el conocimiento de aquel que nos llamó por su gloria y excelencia, por medio de las cuales nos ha dado preciosas y grandísimas promesas (2Pedro 1:3-4).
“Aférrate a las promesas para que tus días en la Tierra sean bendecidos como Dios lo promete en su Palabra”
PRINCIPIOS
1- Todas las promesas que el padre nos ha otorgado empieza con la promesa de salvación. Por tanto, di a los hijos de Israel: Yo soy el Señor, y os sacaré de debajo de las cargas de los egipcios, y os libraré de su esclavitud, y os redimiré con brazo extendido y con juicios grandes (Éxodo 6:6; LBLA), Esa salvación es la que nos hace herederos de la vida eterna a pesar de ser pecadores. Dios nos hace aptos para tener las promesas del Señor, somos sus escogidos.
2- Somos parte de la familia de Dios, el sentido de pertenencia es lo que define quiénes somos y a quién pertenecemos, cuando no lo tenemos claro somos frágiles, temerosos y vulnerables ante cualquier situación difícil. Nuestra identidad en Dios no solo nos dice que le pertenecemos a él, sino que también nos revela las promesas que recibimos gracias a su paternidad. ¡Dios nos da su Espíritu para que siempre sepamos quiénes somos!
3- Nuestra unión con Cristo nos dice realmente quiénes somos, a quién pertenecemos y a qué tenemos derecho, nadie puede convencernos de algo diferente. Nunca abandonemos la esperanza de recibir de Dios lo que tanto le hemos pedido porque él nunca olvida sus promesas para nosotros. El Señor no retarda su promesa (2Pedro 3:9). Como hijos escogidos tenemos la gloriosa oportunidad de conectarnos a nuestra herencia en Cristo.
4- Cuando nos encontramos en medio de la adversidad nos cuesta creer que las cosas podrían mejorar, es que no solo se trata de declararlo, sino también de creerlo. Eso nos da una idea clara de cuán especiales somos para nuestro Padre, esa es su forma de decirnos que no importa cuántas tribulaciones estemos pasando, él nos adoptó y nos dio la promesa que estaría con nosotros todos los días de nuestras vidas.
APLICACIÓN
Mantengamos nuestra fe en cada promesa que se nos fue dada, Dios tiene cuidado de suplir nuestras necesidades, pero también de cumplir los deseos de nuestro corazón. Dios no es un padre que solo nos da el pan de hoy, sino también el de mañana, siempre nos bendecirá si perseveramos en la fe.
DECLARACIÓN DE FE
Abrazo cada promesa que el padre me ha hecho, la hago mía y espero en su cumplimiento. Amén.
ORACIÓN Espíritu Santo, me has enseñado que contigo soy más que un vencedor, en ti, cada promesa que el Padre me hizo en su Palabra se cumplirá, aumenta mi fe en cada situación que viva para no desmayar y dudar de lo que me has prometido. Amén
