Tema 19: OBEDIENTES
Capítulo 01: ESCOGIDOS
Serie: UNCIÓN
Pedro contestó: — Señor, si eres tú, manda que yo vaya hasta ti caminando sobre el agua (Mateo 14:28; BLP).
“EL Espíritu Santo ha venido sobre nuestras vidas y nos personas sobrenaturales”
PRINCIPIOS
1- El Espíritu Santo es un regalo que Dios nos ha dado, no es un premio, el caminar en el poder y la unción del Espíritu Santo depende de nosotros, de nuestra obediencia. Dios desea una transformación completa en nuestras vidas, el Espiritu es enviado para que seamos moldeados y ser testimonio de su poder transformador. Estamos siendo transformados en la misma imagen de gloria en gloria, como por el Señor, el Espíritu (2Corintios 3:18; LBLA).
2- La presencia del Espíritu Santo es un regalo que Dios nos dio para que sepamos que siempre está con nosotros y nunca nos dejará. Únicamente debemos pedirla, ser obedientes y nos la dará. La unción viene sobre nosotros por causa de la obediencia que le tenemos al Señor cuando le creemos. Yo enviaré sobre vosotros la promesa de mi Padre; pero vosotros, permaneced en la ciudad hasta que seáis investidos con poder de lo alto (Lucas 24:49; LBLA).
3- Dios nos manda a hacer cosas inusuales, y aunque para nosotros sea imposible que pida algo así, lo hace para formarnos. Vayan a la aldea que está frente a ustedes y, cuando entren en ella, hallarán atado un borriquillo en el cual ningún hombre ha montado jamás. Desátenlo y tráiganlo (Lucas 19:30; RVA-2015). Aun cuando una instrucción nos parezca una locura no dudamos, Dios nos quiere enseñar que en la obediencia esta la bendición.
4- En los momentos en que Dios nos pide que hagamos cosas inusuales y difíciles para nuestra naturaleza humana, es cuando debemos morir a nuestro ego, porque es en esos instantes cuando Dios nos forma para que podamos ser ungidos. Para ser llenos del poder de Dios necesitamos obedecerle de manera total, y también obedecer a las personas que sí vemos. Obedeced a vuestros pastores, y sujetaos a ellos; porque ellos velan por vuestras almas (Hebreos 13:17).
APLICACIÓN
La obediencia que uno muestra hacia el Señor nos ayuda a hacer morir nuestra propia carne. Si queremos caminar bajo la unción y el poder de Dios, para que se manifieste en nuestra vida, nuestra obediencia debe ser absoluta a los mandamientos y órdenes que el Señor nos haya dado.
DECLARACIÓN DE FE
Renuncio a toda rebeldía en mi vida, decido obedecer a mis autoridades y al Espíritu Santo. Amén.
ORACIÓN
Padre, me presento delate de ti, descubro mi corazón, escudriña lo mas íntimo de mi ser, y si encuentras alguna raíz de desobediencia, perdóname y ayúdame a liberarme de toda rebeldía o cualquier pecado que me aleje de tu presencia, por favor, imparte sobre mí la unción de tu Espíritu. Amén.