Tema 10: EL CORAZÓN DEL CREADOR
Capítulo 01: CONOCER PARA OPERAR
Serie: DONES ESPIRITUALES
Así también vosotros; pues que anhelais dones espirituales, procurad abundar en ellos para edificación de la iglesia (1 Corintios 14.12).
“El anhelo es la disposición del corazón para hacer una entrega gloriosa”
PRINCIPIOS
1- Anhelo, deseo; pueden ser las palabras que describen el corazón de un padre al ver a sus hijos crecer, el padre trabaja para ellos, todo lo que hace lo realiza con el fin de que lleguen a ser hombres de bien y puedan cumplir el propósito por el cual Dios les hizo venir al mundo. En Abraham vemos un claro ejemplo de lo que es el Padre Celestial, trabajo durante muchos años produciendo todo tipo de riquezas para cuando fuera el tiempo y el momento eso llegara a formar parte de la herencia de su hijo quien era el cumplimiento de la promesa.
2- La revelación más importante y extensa con respecto a la paternidad de Dios se relaciona con la vinculación de la Primera Persona a la Segunda Persona. La Primera Persona se describe cómo «el Dios y Padre de Nuestro Señor Jesucristo». La revelación teológica más comprensiva del Nuevo Testamento es que Dios el Padre, la Primera Persona, es el Padre del Señor Jesucristo, la Segunda Persona. Pero cuando vino el cumplimiento del tiempo, Dios envió a su Hijo, nacido de mujer y nacido bajo la ley (Gálatas 4.4). El apóstol define aquí como «cumplimiento del tiempo» a lo que antes había llamado el «tiempo señalado por el Padre». Dios había señalado de antemano el tiempo en que la bendición prometida a Abraham se cumpliría en Cristo, su descendiente.
3- Los Dones del Padre, sus Operaciones, es todo aquello por medio de lo cual Él se manifestó, que las diferentes versiones de la Biblia lo traducen como: Operaciones (LBLA), manifestaciones de poder (DHH), funciones (NVI), actividades (RV77/95), potestades (Aramea) estas versiones por sí mismas amplían el concepto de lo que son. Las operaciones del Padre corresponden a las manifestaciones gloriosas de Su presencia y de Su poder, fundamentadas en la facultad que tiene el Padre en Sí mismo, en razón de su soberanía, de obrar o hacer lo que desea y de manifestarse sobrenaturalmente, en virtud de su amor y santidad.
4- El Padre entrego al Hijo todas las riquezas de su gloria como herencia para preparar a su Iglesia con el poder y la unción de su Espíritu Santo dando hombres idóneos para llevarlos a la plenitud y la manifestación de los santos en esta dispensación. En la calidad de Hijo recibió toda autoridad en el cielo y en la tierra, llegando hacer el fundamento verdadero de nuestra fe, Él es la piedra del ángulo sobre el cual se levantan columnas que mantienen firme a la Iglesia, esas columnas son los dones que el hijo entrego para embellecer y preparar a su novia.
5- Los Dones del Hijo son los ministerios primarios que Él ha constituido para que su Cuerpo (la Iglesia de Cristo) sea enriquecido hasta alcanzar la estatura del varón perfecto. ¿Cuántos y cuáles son estos ministerios primarios? Son cinco, Y él mismo constituyó a unos, apóstoles; a otros, profetas; a otros, evangelistas; a otros, pastores y maestros. (Efesios 4.11). En Cristo Jesús se desarrollaron a plenitud los cinco ministerios: Apóstol (Hebreos 3.1), Profeta (Juan 4.19, NVI) Evangelista (Lucas 4.16-21), Pastor (Juan 10.11) y Maestro (Juan 13.13-14a), dejándonos ejemplo de lo que debe existir en su cuerpo místico, la Iglesia.
APLICACIÓN
Estamos en el tiempo de la manifestación de los hijos de Dios, la Escritura dice: Porque el anhelo ardiente de la creación es el aguardar la manifestación de los hijos de Dios (Romanos 8.19). El anhelo del Padre es que los dones sean operados por todos sus hijos para él mismo manifestarse al mundo por medio de nosotros. En el momento que estamos listos para recibir la impartición, el Espíritu Santo descenderá para saturarnos de su gloria y activar los dones espirituales que el Padre nos ha entregado.
DECLARACIÓN DE FE
Hoy determino sumergirme en el río del Espíritu, decido abandonar los malos hábitos que estorban la impartición del Espíritu sobre mi vida. Acepto el llamado de Dios para operar en esta tierra y decido esforzarme para alcanzar la plenitud de la gloria de mi Dios. Amén!
ORACIÓN
Precioso y eterno Dios, muchas gracias por darme la oportunidad de conocer más acerca de los dones espirituales que están disponibles para que pueda operar en el poder de tu reino. Por favor ayúdame a lograr avanzar en mi fe y ser activado en los dones que necesito para ser una persona eficiente en todo lo que haga. Amén!
Con amor… Dr. José Félix!!