Tema 21: ORAR SIN CESAR
Capítulo 10: MILICIA ESPIRITUAL
Serie: UNCIÓN
Con gozo dando gracias al Padre que nos hizo aptos para participar de la herencia de los santos en luz; el cual nos ha librado de la potestad de las tinieblas, y trasladado al reino de su amado Hijo (Colosenses 1.12–13).
PRINCIPIOS
1- Mi padre me enseñó a ser intencional en mis acciones, siempre me decía, “apunta bien a lo que haces”, me ayudó a pensar con una mente pro-activa, enfocar claramente mi fuerza en más relevante, hasta hoy lo sigo haciendo. La oración de milicia debería ser sumamente intencional. Orar por orar es bueno, pero orar enfocado en aquello que “debemos” orar es lo mejor. El apóstol Pedro dice que los ojos del Señor están sobre los justos, y sus oídos atentos a sus oraciones (1 Pedro 3.12).
2- Según la Escritura, Dios nos hizo “aptos”, calificados, competentes, para acceder a sus bendiciones, por ser sus hijos, tenemos oportunidad de disfrutar de una herencia gloriosa en todos sentidos, desde familia, trabajo, finanzas, bienes, paz, de tal forma que la oración que persevera y es intencional es una llave que abre la puerta para que todo llegue a nuestras manos. Y te hará Jehová sobreabundar en bienes, en el fruto de tu vientre, en el fruto de tu bestia, y en el fruto de tu tierra.
3- Puedo orar de una manera intencional cuando tengo el cuadro completo de lo que quiero, cuando tengo los detalles y los introduzco en la oración es mucho más poderoso. ¿Por qué Jesús le preguntó a un ciego, qué quieres que te haga? (Lucas 18.41). ¿Acaso no era obvio que quería recibir la vista? ¡Jesús le estaba motivando a ser intencional en la oración! Señor, que reciba la vista. ¿Cuál fue el resultado de la oración intencional? Jesús le dijo: Recíbela, tu fe te ha salvado. Y luego vio, y le seguía, glorificando a Dios (Lucas 18.42–43).
4- Sobreabundar es tener más que abundancia. Ir mucho más allá de lo ordinario. Tener mucho más de lo común. Esta promesa es para los hijos del Altísimo y su acceso es cuando tenemos la llave de la oración intencional, unida con una fe práctica, sencilla, simple, para creer que lo que Dios nos dice lo cumple. Dios no es hombre, para que mienta, ni hijo de hombre, para que se arrepienta. Él dijo, ¿y no hará? Habló, ¿y no lo ejecutará? (Números 23.19).
APLICACIÓN
Seamos practicantes de una fe sencilla, no compleja, creer es demostrar a Dios que no estamos desesperados, ansiosos ni deprimidos, que podamos gozarnos en medio de las situaciones difíciles y tomar las tribulaciones como una forma de creer como seres humanos y ser mejores cada día. La oración intencional nos permite enfocar nuestras palabras y acciones de la manera correcta, demostrando a Dios que confiamos en él.
DECLARACIÓN DE FE
Seré intencional en operar en una fe simple, sencilla, creyendo que Dios responderá a mis oraciones. Amén.
OREMOS
Dios hermoso y eterno, hoy me humillo delante de ti, reconozco que tú eres mi Rey y Señor, mi vida te pertenece, soy tuyo, oveja de tu prado, la niña de tus ojos, estoy inscrito en el libro de la vida, la eternidad a tu lado es una realidad hermosa, muchísimas gracias por tu amor incomparable e incondicional para tu mi y mi casa. Amén
