Tema 27: CONFRONTACIÓN
Capítulo 01: Escogidos
Serie: UNCIÓN
Toda la Escritura es inspirada por Dios y útil para enseñar, convencer, corregir, instruir en justicia (2Timoteo 3:16).
“Solo delante del Señor podemos convertirnos en sabios, cuando nos disciplina nos da mas sabiduría”
PRINCIPIOS
1- Somos formados en lo secreto, durante los momentos de intimidad con Dios, cuando le buscamos con un corazón sincero y puro, se revela a quien le anhela. No nos rindamos, insistamos delante de su trono, no le vemos físicamente, pero debemos estar seguros que hablará a nuestro espíritu y nos transformará. Vosotros no estáis en la carne sino en el Espíritu, si en verdad el Espíritu de Dios habita en vosotros (Romanos 8:9; LBLA).
2- Purifícame con hisopo, y quedaré limpio; lávame, y quedaré más blanco que la nieve (Salmos 5:7). Dios nos lleva a la intimidad y a su secreto para luego clamar por una transformación. David comprendió el balance, ya que cargando su pecado le pide al Señor que cambie su vida y le haga oír gozo y alegría. Dios no quería confrontarlo para condenarlo, sino para sacarlo adelante. Cuando Dios nos confronta es para traer sanidad a nuestra alma y darnos una oportunidad de ser hechos a su imagen y semejanza.
3- El hombre que no quiere entrar en la presencia de Dios para ser descubierto, corregido y transformado, no podrá ser usado para transformar a otros. Podemos hablarle a otros para que corrijan su vida, porque la nuestra ya ha sido corregida. Devuélveme la alegría de tu salvación; que un espíritu obediente me sostenga. Así enseñaré a los transgresores tus caminos, y los pecadores se volverán a ti (Salmos 51:12-13). ¡Somos transformados para transformar a otros!
4- Todos los días debemos vivir momentos ante el Señor, la clave de la vida pública es la vida privada. Si deseamos éxito en público, busquemos primero el éxito privado delante de Dios. Cuando Dios nos pide que cerremos la puerta es porque espiritualmente están por suceder momentos gloriosos, contemplaremos la hermosura de su santidad, concebiremos el llamado de nuestra vida y tendremos la visión exacta de lo que Dios desea que hagamos.
APLICACIÓN
Dios nos confronta con nuestra realidad para que veamos nuestra debilidad y aprendamos a confiar en su poder. Nuestra naturaleza es revelada, nos vemos tal cual somos. Entonces dije: ¡Ay de mí! que soy muerto; porque siendo hombre inmundo de labios, y habitando en medio de pueblo que tiene labios inmundos, han visto mis ojos al Rey, Jehová de los ejércitos (Isaías 6:5).
DECLARACIÓN DE FE
No tengo temor ser confrontado por Dios, estoy seguro que saldré transformado. Amén.
ORACIÓN
Padre amado, llévame a ese lugar secreto donde solamente existamos tú y yo, lo que tengas que decirme, o revelarme para transformarme, hazlo, porque sé que tu amor es más fuerte que cualquier pecado que tenga, cámbiame a tu imagen. Amén.