Devocional: Unción – Tema 20: RENOVARNOS – Dr. José Félix

Tema 20: RENOVARNOS Capítulo 06: HABITOS DE UN ADORADOR Serie: UNCIÓN No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta (Romanos 12:2). “Alguien tenía razón cuando dijo: ¡Cambia antes que tengas que hacerlo!” PRINCIPIOS 1- Siendo honestos, ninguno está exento de pecar, por muy espiritual que alguien sea o parezca siempre existirá la posibilidad de caer. Por mucho que amemos al Señor siempre habrá invitaciones para pecar, ya sea directas de nuestro más grande enemigo, del mundo o desde nuestra propia concupiscencia. Lo que garantizará que no cedamos a esas invitaciones será nuestra consistencia espiritual. Nuestra vida espiritual no se desarrolla de manera automática, sino como cualquier otra disciplina debe de ser cultivada de manera intencional. 2- Pero el hombre natural no percibe las cosas que son del Espíritu de Dios, porque para él son locura, y no las puede entender, porque se han de discernir espiritualmente (1Corintios 2.14). La garantía es que nos fusionemos con el Espíritu Santo para renovar nuestra humanidad y ser como Cristo cada día. La renovación de la mente es dejar de pensar como el mundo para accionar como el mundo. ¡La renovación nos empuja para ser como Jesús cada día! 3- Quizá alguna vez tu computadora ha dejado de funcionar o se ha vuelto muy lenta; es muy probable que la razón haya sido no haber hecho las actualizaciones que constantemente el sistema le está haciendo a los programas. Pero cuando actualizamos la máquina, esta vuelve a funcionar correctamente como si fuera completamente nueva. De la misma manera necesitamos constantemente actualizar nuestro ser interior. Es por ello que el hábito de la renovación debe ser parte de nuestra vida. 4- El gran David, en algún momento de su historia dejó de actualizar su vida espiritual y un día la tentación le visitó, su ser interior estaba tan debilitado que terminó cediendo al pecado. Tiempo después fue confrontado por el profeta Natán y luego de haber sido reprendido comprendió la necesidad de ser renovado. Su proceso lo dejó plasmado de esta manera: He aquí, Tú amas la verdad en lo íntimo, y en lo secreto me has hecho comprender sabiduría. Crea en mí, oh Dios, un corazón limpio, y renueva un espíritu recto dentro de mí (Salmos 51:6 y 10). APLICACIÓN ¡Renovarse requiere honestidad! La renovación de nuestro ser interior empieza reconociendo nuestra condición. Cuando somos honestos con Dios, con nosotros mismos y con el resto de las personas se nos da acceso a la verdad que trae consigo sabiduría y renovación espiritual. Cuando tratamos de esconder nuestra realidad, nos hacemos esclavos de la mentira y detenemos nuestro crecimiento, cuando dejamos de crecer empezamos a morir. DECLARACIÓN DE FE Mi vida es de mi Señor, a partir de hoy me renuevo cada día para servir mejor a su reino. Amén. ORACIÓN  Poderoso y majestuoso Dios, muchas gracias por darme la oportunidad de crecer cada día, no he sido consumido a causa de mis pecados, me has dado la oportunidad de renovarme y lo voy aprovechar para ser mejor y ser útil en tu reino. Amén.